Agente Enoc

Para Abigail ese domingo era perfecto, su primer día libre en meses y podría dedicarse todo el día en ella y descansar de tanto ajetreo seguido en su vida de actriz.

Ese día antes de llegar a casa por recomendación de su amiga Honey decidió pasar a la nueva Boutique naturista que habían abierto llamada “La Gota de Miel”

Tenían cremas, cosméticos y mascarillas que según la descripción puesta en la Boutique podían quitar años de encima.

Solo iba en específico por un producto que según parecía era el mejor de la tienda y los resultados eran muy efectivos.

Llego a la parte en donde vendían mascarillas y busco el producto pero no lo veía exhibido.

Abigail al no encontrar el producto se dirigió a una de las empleadas.
-Buenas tardes- dijo ella dirigiéndose a la empleada.

-Buenas tardes ¿En qué le puedo ayudar?- contesto la empleada muy cortésmente.

-Estoy buscando una mascarilla, que se encuentra hecha de cera de abeja de aromas dulces. ¿La tendrán aun? – pregunto Abigail.

-Es de nuestros productos más populares acá en la tienda, por eso luego se acaba muy rápido, pero déjeme checar en la bodega a ver si aún me quedan. – dijo y se dirigió hacia la parte de atrás de la tienda. Después de unos minutos salió con una en la mano.

-Tiene suerte, aún nos quedan varias en la bodega, esta es la que me pidió de aromas dulces. – dijo mientras Abigail tomaba la bolsa y la examinaba.

-Gracias Señorita- dijo y se dirigió hacia la caja.

Después de pagar ya se dirigió a su casa, quería probar la efectividad de la mascarilla y esa tarde era el mejor momento para hacerlo.

No tardó mucho en llegar a su casa puesto que estaba a una cuadra de la Boutique y empezó con los preparativos para ponerse la mascarilla. Al empezar a aplicársela podía sentir los aromas dulces que emanaban de esta y de alguna forma esos aromas la relajaban.

No tardó mucho en aplicarse la mascarilla, ahora tendría que esperar a que pasara media hora y en esa media hora se podría retirar la mascarilla.
Se recostó en el sillón de la sala dispuesta a descansar mientras llegaba la hora de quitarse la mascarilla, no tardo mucho tiempo en quedarse dormida.

Al pasar la media hora, la chica ahora ya se encontraba profundamente dormida en el sillón.

En ese momento, atraídas por el aroma dulce que emanaba de la mascarilla un enjambre de abejas entro a la casa de la joven actriz por una de las ventanas que se encontraba abierta en la sala.

No tardaron mucho en encontrar la fuente del rico aroma y zumbando empezaron a posarse en la cara de la chica.

Los zumbidos de todas las abejas juntas empezaron a despertar a la chica de su letargo y al abrir los ojos, no pudo ocultar su pánico al ver su cara rodeada de abejas que para ese momento ya habían empezado a perforar su rostro.

Entrada en pánico empezó a correr y gritar para intentar espantar a las abejas, un grave error puesto que estas lo interpretaron como un gesto de agresión y empezaron a picarla en las orejas.

Sin embargo no eran las picaduras lo único que la estaba preocupando, las abejas se encontraban introduciéndose en todos los orificios de la cara y muchas ya se encontraban perforando la garganta.

A la chica ya no le quedaba mucho tiempo, con lo poco de energía que tenía empezó a buscar su teléfono fijo y con lo último que le quedaba de fuerzas intento llegar hasta el teléfono, pero ya era tarde, puesto que antes de poder tomarlo se desplomo en el piso, muerta.

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